La Pachamama es la Madre Tierra, nace con el objetivo de dar a conocer la riqueza natural y histórico de nuestro entorno.
Es la diosa suprema honrada por los pueblos aborígenes que habitan el Noroeste de Argentina, Bolivia y Perú. Ella es considerada la madre (Mama) que engendra la vida, la nutre y la protege. Su nombre se popularmente traducido como “Madre Tierra”, aunque su significado arcaico de “Pacha” no estaba solo ligado a la Tierra, si no al universo y al tiempo.
El día de la Pachamama se celebra a primeros de agosto, aunque sus fiestas se extienden durante todo este mes que está dedicado todo a ella. Las celebraciones de Pachamama incluyen el respeto por todos los seres vivos para que ellos no son sólo el fruto de su creación, sino que forman parte de ella misma.
Los seguidores no pretenden dominar la naturaleza, sino protegerla y cuidarla, como una manera de devolver a la Madre todo lo que ella nos brinda con generosidad.
El origen de la Pachamama
Ancestralmente fueron las tribus de quechuas y demás etnias de la parte andina de América quienes dieron impulso y realizaron rituales y ofrendas en honor a la pachamama.
En estos rituales se solían realizar ofrendas como hojas de coca y fecos de llama. Según estas antiguas tribus estas ofrendas a la pachamama servían para fertilizar la tierra y lograr buenas cosechas. De esta forma evitaban las malas siembras y lograban buenos alimentos para toda la temporada.
El actualidad hay muchos grupos y comunidades con influencia de estos grupos étnicos que todavía conservan las creencias y rituales relacionados a la pachamama. Estos grupos se encuentran principalmente en las zonas montañosas de Perú, Ecuador, Bolivia, y también en el norte de Chile y Argentina.
Hay que entender que la pachamama no es solamente la Tierra, dentro de este término también se incluye a la naturaleza y el universo. La pachamama es un todo qué representa el origen de nuestra vida.